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Excéntrico, ofrenda de Rosalila, Copán (Artefacto 90-10) (CPN P2764)

Por Peabody Museum en Sketchfab

Traducido de "Individual Descriptions of Bifaces and Eccentrics [Descripciones individuales de las hojas bifásicas y de los excéntricos]" por Payson Sheets. Apéndice a Protecting Sacred Space: Rosalila's Eccentric Chert Cache at Copan and Eccentrics among the Classic Maya por Ricardo Agurcia Fasquelle, Payson Sheets y Karl Andreas Taube (Monograph 2, Precolumbia Mesoweb Press, San Francisco, 2016):

Este excéntrico de excelente fabricación muestra cuatro cabezas humanas y, por lo mismo, sería un excéntrico cuadricefálico, por utilizar la terminología de Clark et al. (2012a). El artesano tuvo un control excepcional durante todas las etapas de fabricación evidentes en este artefacto, desde la percusión temprana para dar forma a la pieza y adelgazarla, pasando por la percusión indirecta ejecutada para la mayoría del desconchado, y finalmente el desconchado por presión. De todos los excéntricos de la ofrenda, este presentaba el mayor reto de fabricación, debido al espacio vacío logrado por encima de la cabeza del personaje principal. El menor error de cálculo en la aplicación de fuerza habría roto el delgado puente. La pieza casi no presenta fracturas escalonadas o de giro y sólo se encontró una rotura, que probablemente ocurrió durante la fabricación. Si la rotura hubiera ocurrido durante el manejo de la pieza entre el taller y el depósito en la ofrenda, probablemente habría resultado en la ruptura de una parte mayor del artefacto, dada la extraordinaria fragilidad de su tercio superior, por encima del rostro del personaje principal. La rotura se encuentra en la parte superior de la pieza, en donde falta un elemento curvo, que se estima debió tener entre 10 y 15 mm de longitud.

Longitud (altura): 440 mm. Anchura: 145 mm. Grosor: 14.5 mm. Peso: 524 gramos.

El vástago aún conserva una cantidad importante de corteza pétrea y mide 25.4 por 4.7 mm. Y la base del vástago presenta una pequeña faceta plana, común en los excéntricos de Rosalila y en una de las hojas bifaciales menores. No se sabe si estas facetas fueron fabricadas o si son vestigio de la forma original de la pieza antes de su fabricación, como es el caso de la presencia de corteza pétrea. No obstante, su prevalencia indica que se consideraron importantes y quizá debieron tener un significado simbólico poderoso. Las facetas podrían estar relacionadas de alguna manera con la corteza de carbonato, los contextos y los orígenes.

El primer elemento del personaje primario que se ve por encima del vástago parece ser una pierna; de ser correcta esta interpretación, el personaje se representó sentado. La parte inferior de la pierna muestra un muescado oblicuo que apunta hacia abajo, creado por seis muescas que dan como resultado seis "dientes", que probablemente aludan al relámpago.

Detrás de la pierna hay una cabeza humana con muescado oblicuo que apunta hacia abajo y hacia adentro, logrado mediante ocho muescas que produjeron ocho dientes. El tocado presenta dos muescas oblicuas que crean tres dientes angulados hacia abajo, así como un elemento delgado y curvo en la parte superior, que fue formado con gran fineza.

Este excéntrico resulta inusual en este grupo por tener líneas casi perfectamente rectas que van desde el vástago hasta el pecho, el cuello y la espalda del personaje principal. El brazo del personaje principal tiene una mano vuelta hacia arriba que apunta al rostro y el gesto bien pudo tener un significado específico. Sobre la cabeza hay una obra maestra de control en el desconchado, que consiste en dos cabezas decoradas conectadas por un elemento de puente. Sólo un artesano con enorme habilidad habría podido lograr un espacio vacío con elementos de circunferencia delgados sin romper la pieza y las roturas potenciales habrían ocurrido con tan sólo incurrir en un pequeño error de cálculo en la presión o en la fuerza de la percusión indirecta en cualquiera de los muchos puntos de fragilidad. Sólo un artesano maestro pudo crear un espacio vacío en el excéntrico de esquisto con un control tan impresionante del desconchado que permitiera lograr detalles tan elegantes. Quienes trabajamos la lítica no podemos sino admirar la magnitud de este logro.

Sobre la frente del personaje principal hay una cabeza menor, con lo que parece ser un brazo y quizá una pierna diminutos. El personaje presenta un hacha humeante o una antorcha en la frente, en referencia a K'awiil, deidad del relámpago. Sobre el hacha humeante hay cuatro muescas oblicuas que crean tres dientes que apuntan hacia adelante y que quizá representen al relámpago. Sobre ellas está el elemento curvo que está en el punto más alto de la pieza y al que le faltan algunos milímetros en su extremo. Esto parecería deberse a un error de manufactura. Un delgado puente conecta la parte posterior de la cabeza con la parte posterior del tocado de otra cabeza humana. Sobre esa cabeza hay dos muescas relativamente profundas, que crean tres grandes "dientes" que se proyectan hacia adelante. Bajo la cabeza del personaje principal podemos ver una pequeña proyección que podría ser un brazo o mano estilizado(a), si bien sería muy corto(a). Y debajo de esto hay un elemento largo y puntiagudo con muescado oblicuo. Consta de trece muescas que crean trece "dientes" que apuntan hacia abajo y que se parecen mucho al impacto de un relámpago.

Una vez concluido el desconchado, se aplicó una cantidad considerable de color rojo a base de cinabrio, especialmente en las porciones superiores del excéntrico. Después de la aplicación del pigmento, la pieza se envolvió en tela azul y verde, y finalmente en tela de corteza.



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